Si por Los Muyayos fuera haríamos de anfitriones aquí en Tenerife y además a todo tren; de hecho conocemos un sitio mágico camino del Teide que a más de uno se le pondrían los pelos de punta de la emoción ( eso sí no cabe tanta gente). En cualquier caso comprendo que los costes se dispararían y es un tanto complicado.
Yo ya tengo el encuentro como fiesta de guardar, o sea que donde se decida allí estaré...
Y si es ese hotel nuevo de Santiago y nos respetan nuestros hábitos de siempre sin límites de horarios, decibelios, y desfases, no hay problema.


